Desde su debut en la temporada 2009-2010, Junior Lake se ha ganado el respeto de jugadores, dirigentes y fanáticos del béisbol dominicano, primero como gran prospecto y luego por lo que ha demostrado en esta pelota durante más de una década.
Este martes, el nativo de San Pedro de Macorís se convirtió en el único jugador en la historia de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (Lidom) con 30 o más jonrones y 100 robos en serie regular.
Abriendo la tercera entrada del juego contra los Gigantes del Cibao en el estadio Quisqueya Juan Marichal, Lake conectó sencillo al jardín central contra Johan Domínguez. Ya en la inicial, cuando Abraham Almonte tenía conteo de 1-1, se estafó la intermedia obteniendo así la hazaña y su cuarto robo de la temporada.
“Contento con lo sucedido esta noche, agradecido con Dios por la oportunidad que me ha dado, con los fanáticos y con mi familia por el apoyo. Ha sido mucho sacrificio porque ha sido un trabajo duro, un camino de altas y bajas pero valió la pena”, indicó el pelotero de 33 tras concluir el juego.
Pese a la satisfacción que le genera la proeza, Lake tiene un mayor anhelo con los Leones del Escogido, conjunto al que llegó esta temporada tras ser adquirido desde la agencia libre.
“Lo que más anhelo es un campeonato con el Escogido. Esperemos en Dios que eso suceda, con eso sería una una temporada perfecta para cada uno de nosotros”, puntualizó.
Con su actuación del martes, Lake suma tres cuadrangulares esta temporada y cuatro bases robadas. Además de aportar en esos encasillados y en la defensa para los Leones, Lake es co-líder de anotadas del equipo con 8, segundo en boletos con 5 y de los primeros con más hits conectados.