David Ortiz es un ejemplo de perseverancia y éxito.
Luego de ser abandonado por Minnesota, el popular jugador llegó a Boston y construyó una carrera digna del Salón de la Fama. Sus números fueron resonantes: 541 jonrones y tres anillos de Serie Mundial.
Fuera del terreno, también ha demostrado ser un líder. En un momento crítico, defendió el honor de la ciudad tras un atentado. Además, ha sido un ejemplo al salvar decenas de niños con operaciones del corazón a través de su fundación.
Desde su retiro, David prometió conocer su país y el mundo para disfrutar de su éxito, carrera, fama y dinero. Sin embargo, esto parece incomodar a algunos. Las críticas suelen surgir con frases como: «Pero David está en todas.»
A través de su Instagram, David respondió contundentemente. Explicó que tuvo una carrera de sacrificios, al punto de no poder asistir a los cumpleaños de sus hijos. Durante casi 30 años ligados al béisbol, nunca tomó un día libre para enfocarse en otra cosa que no fuera su profesión.
«Cuando ustedes duren 30 años jugando pelota, de lunes a domingo, sin saber cuándo es Semana Santa ni los cumpleaños de mis hijos, y se busquen lo suyo, entonces me podrán atacar,» expresó.
Y añadió: «Cuando me vean en fiestas y donde sea, sigan criticando. Yo me fajé, y ahora es mi tiempo de disfrutar… Y con mi familia cerca de mí siempre.»
Estoy totalmente de acuerdo con David. Él ya cumplió con su trabajo y ahora tiene todo el derecho de disfrutar su vida.
¡Palante, David!
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