El infielder Michael de León ha tenido un rol de principalía en el inicio de la temporada con los Campeones Nacionales y del Caribe, Tigres del Licey. De León ha sido titular en 8 de los 12 partidos del conjunto y en 12 juegos ha acumulado una cantidad similar de apariciones a la cantidad que agotó en la pasada campaña.
«La clave ha sido la preparación y la paciencia. Me integre temprano al equipo. Desde los entrenamientos he venido realizando un trabajo arduo y me he sentido bien físicamente y con confianza. Es más que un privilegio recibir dicha confianza y oportunidad de aumentar mi rol y saber que las cosas van fluyendo bien” expresó.
Luego de tardar 215 apariciones para conectar su primer jonró en Lidom, el campocorto azul ha disparado tres cuadrangulares desde la temporada pasada evidenciando su desarrollo físico a lo largo de los años.
“Uno tiene la obligación de venir cada año mejor físicamente. Trabajar en pequeños detalles para que las cosas sigan pasando. Al final, en un parque grande como este no debe ser el objetivo buscar un cuadrangular, pero cuando te fortaleces físicamente y haces un buen contacto la pelota puede salir” señaló.
De León está en su séptima temporada con el conjunto y se ha convertido en un modelo a seguir gracias a su ética de trabajo. Además como veterano aporta al equipo más allá de lo que puede hacer en el terreno.
“Uno trata de mantener el equipo activo sobre todo cuando las cosas en el terreno no están saliendo. Tomamos carta en el asunto, si uno está jugando y cuando no se está jugando uno trata de mantener un buen ambiente y el ánimo del equipo” agregó.
Los Tigres del Licey tienen una racha de tres derrotas consecutivas. Sin embargo, León mantiene una perspectiva correcta ante los acontecimientos recientes.
“No considero que sea una mala racha, apenas van 12 partidos. Esta liga no es de los mejores tras 12 sino de 50 juegos. Lo que tenemos que concentrarnos es en divertirnos y dar lo mejor de nosotros en el terreno” concluyó.